Mochilas Hidratación 

Comprar una mochila de hidratación para ciclismo es la mejor opción para tener el agua siempre disponible en rutas largas y sin posibilidad de paradas de avituallamiento.

Mantenerse hidratado mientras pedaleas es fundamental para tu salud y para tu rendimiento. Para conseguirlo, puedes recurrir a los clásicos bidones o animarte a comprar una mochila de hidratación.

Las ventajas de las mochilas de hidratación para ciclismo sobre los bidones son varias: tienen mayor capacidad de almacenamiento, te permiten beber de la boquilla manteniendo las manos en los manillares y puedes utilizarlas para llevar herramientas, barritas energéticas, geles u objetos personales.

Algunos ciclistas son reticentes a la hora de probar las mochilas de hidratación pero, por lo general, quien las prueba no vuelve a los bidones. Quizá sea por la sensación de seguridad y de independencia que te proporciona salir bien equipado y poder hacer frente a cualquier imprevisto.

Camelbak es la marca fabricante de mochilas de hidratación por excelencia. En Ciclos Campuzano tienes a tu disposición sus modelos más míticos y sus últimas novedades. También puedes comprar mochilas de hidratación de otras marcas que ofrecen una estupenda relación calidad precio.

No hay peor experiencia que quedarte sin agua en medio de una ruta por la montaña, a pleno sol, con una sed que crece por momentos y sin posibilidad de avituallamiento en kilómetros. No se lo recomendamos ni a nuestro peor enemigo.

Por eso insistimos tanto en que la elección de los accesorios de hidratación es una de las más importantes. Puedes elegir entre los bidones de toda la vida o las más modernas mochilas de hidratación. Se trata de una decisión muy personal, porque cada ciclista tiene unas preferencias a la hora de hidratarse. Pero, elijas el método que elijas, es crucial que apuestes por bidones o mochilas de calidad, de marcas reconocidas y contrastadas, como los que tienes a tu disposición en Ciclos Campuzano. Es tu salud la que está en juego.

Las mochilas de hidratación están ganando cada vez más adeptos entre los ciclistas experimentados y que cogen la bici con mucha frecuencia, sobre todo en la montaña.

Como su propio nombre indica, son mochilas diseñadas especialmente para transportar agua u otros líquidos. Cuentan con un depósito en su interior y un manguito con boquilla que te permite beber directamente de ellas en marcha.

Comprar mochilas de hidratación: principales ventajas

Comprar mochilas de hidratación resulta muy útil cuando te gusta realizar rutas largas y por terrenos en los que no es fácil encontrar un punto de avituallamiento a mitad de camino.

La mochila te permite almacenar mucha más cantidad de líquido que los bidones, desde 1,5 hasta 5 litros, aunque lo más habitual es llevar entre 2 y 3 litros. Los bidones tienen una capacidad máxima de 1 litro, aunque lo habitual es que almacenen entre 300 y 700 mililitros. En una bicicleta normal, se pueden llevar hasta dos bidones, por lo que con este sistema la cantidad de agua que puedes llevar encima es limitada.

Comprar mochilas de hidratación para ciclismo tiene otra gran ventaja, y es que las puedes utilizar como almacenamiento no solo de agua, sino de otras cosas, como pequeñas herramientas, objetos personales o barritas y geles.

Por otro lado, las mochilas de hidratación son más cómodas y seguras de utilizar en marcha, ya que no tienes que quitar las manos del manillar más que para meterte la boquilla en la boca y succionar. Con los bidones debes agacharte para cogerlos y mantenerlos en tu mano mientras bebes, lo que afecta inevitablemente al control de la bici a menos que pares para beber.

Eso sí, deberás tener en cuenta que la mochila llena de agua y objetos puede llegar a pesar bastante y tendrás que acostumbrarte a rodar con ese peso a tus espaldas. Lógicamente, cuanta mayor capacidad tenga la mochila y más la llenes, mayor será este peso.

Comprar mochilas para ciclismo: cómo elegirlas

Capacidad

La característica fundamental que debes tener en cuenta a la hora de comprar mochilas de hidratación para ciclismo es su capacidad. No se trata de que elijas la que mayor capacidad tiene por si acaso, sino de que selecciones la que mejor se adapta a tus necesidades y el tipo de ciclismo que te gusta.

En Ciclos Campuzano vas a encontrar mochilas de hidratación con capacidades que van desde los 1,5 litros hasta los 5 litros.

Las mochilas de hidratación de 1,5 litros tienen la misma capacidad que dos bidones, por lo que quienes optan por ellas lo suelen hacer por motivos de comodidad a la hora de beber y para tener un extra de almacenamiento.

Comprar mochilas para ciclismo de entre 2 y 3 litros de capacidad es lo más habitual. Es una cantidad de agua suficiente para hacer recorridos bastante largos sin tener que parar a rellenarlas y su peso no es muy elevado.

Las mochilas con más capacidad son ideales para rutas muy largas sin posibilidad de avituallamiento, pero debes tener en cuenta que su peso puede hacerse incómodo si no estás acostumbrado a ellas. Algunos ciclistas que suelen realizar rutas muy largas sin parar optan por combinar mochilas con capacidad intermedia con uno o dos bidones para repartir el peso entre la espalda y la bicicleta.

También debes tener en cuenta la capacidad de la mochila para llevar otros objetos. La mayoría cuentan con varios bolsillos para tener ordenadas las cosas y para repartir bien el peso en diferentes zonas y no sobrecargar solo una parte de la espalda.

Tamaño

Hay notables diferencias en el tamaño de las distintas mochilas de hidratación que tienes a tu disposición en el mercado. En Ciclos Campuzano somos partidarios de las mochilas compactas, porque son las que mejor se llevan y se ajustan. Por eso aquí puedes comprar mochilas de hidratación Camelbak que, sin duda, son las reinas del mercado en cuanto a conseguir buena capacidad de almacenamiento a un tamaño de lo más compacto.

Por regla general, cuanto más grande sea la mochila de hidratación, más pesará y más difícil será de transportar. Debes poner en una balanza si necesitas mucho espacio de almacenamiento porque debes llevar contigo muchos objetos o si prefieres sacrificar almacenamiento para ir más ligero. También puedes utilizar una mochila de hidratación compacta y optar por otro sistema de almacenaje de herramientas o enseres colocado sobre la bici, en vez de a la espalda.

Peso

El peso es muy importante a la hora de comprar mochilas de hidratación. Debes tener en cuenta no lo que pesan vacías, sino lo que pesarán cuando las llenes de agua y de objetos.

Aunque al principio te pueda parecer que el peso es más que llevadero, cuando lleves unas horas rodando con ella a la espalda se te puede hacer cuesta arriba si la has sobrecargado mucho y no tienes experiencia.

Materiales

Los materiales con los que están fabricadas las mochilas de hidratación afectan al peso y a la comodidad a la hora de llevarlas a la espalda.

Es importante que te asegures que los materiales son transpirables, al menos en la zona que estará en contacto con tu espalda y tus hombros, es decir, la parte trasera de la mochila y las asas.

Si vas a rodar en condiciones de lluvia, te recomendamos que elijas una mochila impermeable o la cubras con una funda.

Boquilla

El tipo de boquilla de las mochilas de hidratación es un detalle que debes tener en cuenta, ya que determinará cómo es la salida del agua hacia tu boca. Hay boquillas amplias y estrechas, algunas en las que hay que succionar más y otras en las que el agua fluye con más facilidad. Para todos los gustos.

Debes asegurarte de que el agua no se sale cuando no está en tu boca. Es decir, que no habrá fugas aunque el terreno que atravieses sea accidentado.

Limpieza

La limpieza de las mochilas de hidratación debe ser exhaustiva, después de cada utilización, para evitar que se formen bacterias o moho que las hagan peligrosas. Algunas mochilas, como las mochilas de hidratación Camelbak, te lo ponen fácil porque la parte superior tiene una amplia abertura para poder enjuagarlas sin problemas. En otros modelos es más complicado.